En la cuarta parte narra los actos delictivos en los cuales está cayendo la niñez. En la primera crónica “EN LAS CIUDADES COLOMBIANAS LOS NIÑOS SON LOS LÍDERES DEL HAMPA” trata de que Bogotá es una ciudad dividida en 4 centros donde se concentra más el robo, 2 de los centros son: los mártires y parte del Restrepo, el hampa está dividida en dos ramas, la baja, son los que roban baratijas, es decir relojes, collares, zarcillos o también pueden ser las comidas, la alta, son los que ya roban baúles de carros, apartamentos, etc.
Los niños participan de los actos delictivos como personas que avisan si la policía está próxima a llegar o si alguna persona que los pueda “zapear” se acerca. Si tienen experiencia van subiendo de rango y empiezan a encabezar los planes para los robos, llegando así a convertirse en los líderes de las bandas delincuenciales.
La segunda crónica “EL GAMÍN ES UN SER SUPERIOR” narra como para los gamines o caras sucias como comúnmente se les llama ya existen otras formas de salir adelante, son los nuevos programas del padres JAVIER DE NICOLO, quién en las casas de Bosconia los está desarrollando, allí llegan los gamines para tener una mejor vida.
Al principio en las casas los dejan entrar y quedarse todo el día, pero en las noches los sacan y si quieren volver, deben renunciar a la vida de la calle. Allí les dan dormitorios, comida y estudio, este último demuestra que los gamines también tienen diversas capacidades intelectuales sin embargo las condiciones adquiridas no les facilita desarrollarlas. En las casas del programa también les permiten formar una democracia teniendo sus propios modos de gobernar.
La tercera crónica “EL EXTRAVIADO” narra la historia de un muchacho que vivía a la salida de Bogotá, de estrato bajo y con ganas de salir adelante. A los trece años se va con un amigo a inhalar gasolina y por un descuido se riega en las piernas, cae fuego y se quema las piernas, lo llevan a un hospital operándolo los mejores médicos y allí empieza a contar su historia. A los siete años empezó a estudiar, pero no pudo porque su padre se volvió un alcohólico donde su madre tuvo que asumir las labores de su esposo y él pasa a cuidar a sus hermanos; al ir a una tienda decide irse con sus amigos en un bus con el infortunio de haberse quedado dormido sin darse cuenta que sus amistades se han bajado del transporte, al despertar se ve solo y por lo tanto se baja de este encontrándose perdido y con suerte de encontrarse con dos niñas que llaman a un policía quien se lo lleva a una casa donde hay más muchachos; al otro día empieza a gritar extraviado quitándole el pan de su comida. Dos semanas después lo llevan a una oficina en donde lo mandan a un lugar con más niños de su edad; allí era todo mejor…. También paso por situaciones sexuales bastante difíciles, viajo, trabajo duramente y volvió donde vivía su madre pero no la encontró, esto lo puso triste, al final de su historia terminó con grandes estudios cursando quinto año de bachillerato y cuarto de música, hablando dos idiomas teniendo veintiún años y aún anda en busca de su madre y sus hermanos. Su nombre es ROBERTO RAMIREZ TRIANA.
La cuarta crónica “BERNARDILLO” es narrada en Mesitas del Colegio en 1971, en donde un muchacho con el deseo de ser millonario y sacar a su madre de la pobreza decide dedicarse a ser torero, pero desafortunadamente fue herido por el animal en una corraleja. Sus amigos también toreros tuvieron que empeñar el cuerpo en la funeraria porque no tenían dinero; pidieron limosna para poderlo sacar. Para las personas del pueblo todos se habían alegrado porque por fin había un muerto y fue como dijeron lo de “Bernardillo” fue sólo parte del programa porque gracias a él las fiestas fueron buenas. ¡Ya hubo muerto!, el cadáver de Bernardillo fue llevado a Bogotá a la casa de su madre y todos los aspirantes a toreros lo lloraban porque también habían jurado ser muertos o millonarios.
